El Consejo de Estado admitió hoy la demanda de nulidad en contra del Acuerdo 10 del 29 de diciembre de 2023 expedido por el SENA, a pesar de que el desempleo sigue en dos dígitos y se ampliaron las opciones de contratación.
La demanda admitida, fue presentada por el abogado Cristian Eduardo Stapper con un argumento y advertencia para el sector empresarial que no desea implementar las nuevas medidas, creando pánico entre los sectores de aseo, transporte y logística.
El consejero Jorge Iván Duque Gutiérrez será el encargado de decidir la suspensión provisional solicitada que definirá el futuro del Acuerdo 10 que actualiza el listado de oficios y ocupaciones establecido en el Acuerdo 0009 de 2005, para determinar la cuota de aprendizaje que les corresponde a las empresas obligadas y que además incluyó polémicos oficios.
Necesidades gremiales Vs. Derecho a un empleo digno
Inicialmente, los empresarios saltaron por la cuota de aprendices que debían contratar y justificaron una posible crisis basada en esta cifra. Es la razón detrás de su descontento porque además, si el contrato de aprendizaje se convierte en contrato laboral, se incrementarían los costos para el sector privado con la ya aprobada Reforma Laboral.
De 4.700 a 14.141 aumentó el número de aprendices que las empresas deberían contratar, casi el triple de personas y en porcentaje refleja pasar de un 550 % a un 670 %.
Sin embargo, en octubre pasado, fue tema de discusión, la lista de nuevos oficios que los empresarios pueden contratar. Como lo explicó el comunicado oficial de la institución SENA, esta lista se basa en un referente internacional de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), al que Colombia está vinculada por ejemplo a través del Convenio 111, cuyo objetivo es reducir la discriminación en el empleo y la ocupación, por lo que estos oficios deben ser incluidos, sin significar esto, que sean cursos de formación ofrecidos por el SENA o que vayan a serlo al publicar esta lista.
Lo anteriormente publicado para nada ha sido creado con fines de burla o para imponer nueva nómina en las empresas. A saber: estas pueden contratar los oficios y cargos que les sean necesarios y estratégicos en su organización, con la posibilidad de prescindir de aquellos que no.
De esta manera y bajo el camuflaje de los nuevos oficios, los empresarios buscan con esta demanda su beneficio económico, desconociendo la realidad del país en la que la inflación ya bajado pero no hay nuevos empleos, ni salarios competentes para una de las generaciones más preparadas académica y técnicamente en la historia de Colombia.
Fenalco se pronuncia
«Confiamos en que el análisis del Consejo de Estado tendrá en cuenta las consideraciones planteadas por los distintos actores, en aras de construir un sistema que promueva la empleabilidad y el crecimiento económico de forma sostenible», indicó el abogado Cristian Stapper, Vicepresidente de Fenalco.
Para muchos, aún cabe la duda sobre si lo que debe prevalecer es el derecho de la educación holística e integral en la que se pueda aplicar lo aprendido; el derecho al trabajo digno sobre todo a través de un convenio público-privado en el que se busca el beneficio máximo de los ciudadanos y nueva fuerza laboral o el beneficio general de los empresarios colombianos.
