jueves, febrero 6, 2025
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    Un paso más para la reglamentación de la justicia agraria

    Por: La Chispa

    Tras tres intensas jornadas de debate, las comisiones primeras conjuntas del Congreso de la República aprobaron, en 6 y 7 debate, la reglamentación de la justicia agraria. Con 17 votos en Senado y 30 en Cámara, se aprobó el proyecto de ley ordinaria que establece el procedimiento especial agrario y rural. Esta iniciativa, que forma parte del reconocimiento del campesino como sujeto de derechos, proporciona un instrumento judicial para empresarios, inversionistas, campesinos y productores del campo. Su objetivo principal es ofrecer un mecanismo que evite el uso de la violencia como medio para resolver conflictos relacionados con la tierra y el territorio.

    El representante a la Cámara por el Pacto Histórico, Gabriel Becerra, quien actuó como coordinador ponente del proyecto, celebró este importante logro: “Como coordinador ponente en @CamaraColombia felicito a la ministra de Agricultura, Martha Carvajalino; a Ángela María Buitrago, ministra de Justicia (@MinjusticiaCo); y a mis compañeros de coordinación. Este proyecto se aprueba con un gran consenso alcanzado entre todas las bancadas del Congreso. ¡Es posible hacer un gran acuerdo nacional!”

    Un avance para la cohesión del sector agrario

    La ley aprobada busca dar respuesta a múltiples tensiones que han afectado al sector agrario durante décadas. Estas incluyen disputas de clase, conflictos ambientales y el rol de las víctimas en los procesos de reparación y restitución de tierras. Además, regula y previene futuros desplazamientos forzados, promoviendo un orden en la producción agropecuaria del país.

    Sectores que se beneficiaron de modelos previos de acumulación de tierras han expresado preocupación, pero la normativa busca ofrecer un equilibrio que garantice la estabilidad del sector sin recurrir a la violencia. Este marco permite abordar conflictos históricos y proyectar un desarrollo agrícola más inclusivo.

    Uno de los cambios más significativos es el reconocimiento del campesino como sujeto de derechos, un compromiso asumido desde la Constitución de 1991 que hasta ahora no se había materializado. Con esta normativa, el campesino no solo es protegido en su integridad y derechos, sino que también se integra como un actor fundamental en el desarrollo agrario del país.

    En las regiones más golpeadas por la violencia, donde las leyes habían sido reemplazadas por dinámicas de guerra, esta reglamentación representa un cambio histórico. Protege no solo al campesino, sino también a toda la cadena de producción económica, fomentando la cohesión social y el progreso.

    Potencial agrícola en tiempos de crisis global

    Colombia tiene el potencial de convertirse en una potencia agrícola gracias a sus suelos fértiles, diversidad climática y condiciones únicas. En un contexto global marcado por la escasez alimentaria y los conflictos, esta iniciativa se perfila como una herramienta clave para aprovechar ese potencial.

    La aprobación de esta ley no solo representa un avance jurídico, sino también una oportunidad para redefinir el papel del sector agrario en la economía nacional, priorizando el desarrollo sostenible y la inclusión social. Con este logro, el Congreso envía un mensaje claro: es posible construir acuerdos nacionales en beneficio de todos los colombianos.

     

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